Sentirse solo: ¿qué hacer cuando parece que no se conecta con los demás?

¿Por qué nos sentimos solos?

La soledad, según Verywell Mind, es un estado en el que las personas experimentan la sensación de estar vacías, solas y sin la posibilidad de conectar con los demás. Se trata de algo que afecta a un gran número de personas en todo el mundo. Algunos estudios señalan que, en países como Estados Unidos, al menos la mitad de la población sufre de esta sensación de soledad a diario.

Muchas veces esto no tiene que ver propiamente con estar solo, sino con sentirse solo y aislado. Esto quiere decir que incluso cuando se interactúa o se está con otras personas, es posible experimentar este tipo de sensación. Si además de solo te sientes desconectado, tenemos un artículo donde tratamos el tema y te ayudamos a superarlo. Puedes acceder a él a través del enlace.

Las causas de la soledad son muy variadas, y dependen de muchos factores, pero en algunos casos puede presentarse por la pérdida de un ser querido, una separación o cambios importantes en la vida personal. 

Factores de riesgo que influyen sobre la soledad

Además de las causas que hemos mencionado, hay que tener en cuenta algunos factores de riesgo que pueden llevar a las personas a sentirse solas. En la mayoría de los casos se trata de factores personales, aunque también es posible que sean más amplios y se deban al contexto en el que vive la persona.

Aislamiento social

Según la American Medical Association, uno de los factores de riesgo que más influye sobre la sensación de estar solo es el aislamiento social. Con esto hacemos referencia a personas que no participan de actividades sociales y que no tienen conexiones sociales significativas.

Generalmente, esto es algo que afecta a las personas mayores, sobre todo por la pérdida de amigos y familiares, y por enfermedades que pueden reducir su movilidad. Pero esto no quiere decir que es el único grupo que se puede ver afectado por esto, ya que también puede presentarse en personas jóvenes.

Baja autoestima

Este punto está asociado al anterior, y es que las personas que tienen baja autoestima suelen aislarse y evitan las interacciones sociales. Cuando no se tiene seguridad y la percepción de sí mismo es negativa, se puede pensar que no se merece la atención y el cariño de los demás, lo que lleva a las personas a aislarse y sentirse solas.

Asimismo, es posible que la baja autoestima afecte y distorsione la visión que se tiene de las relaciones. Muchas veces se puede pensar que las personas con las que se comparte tiempo envían señales de desinterés y de rechazo, aunque no sea así.

Pertenencia a un determinado colectivo social

Según el Centers for Disease Control and Prevention, pertenecer a un determinado grupo social, también es un factor de riesgo y puede influir sobre la sensación de estar solo. Estamos hablando de personas migrantes, personas que se identifican como parte del colectivo LGBT+, o personas con algún tipo de capacidad diferente.

La experiencia de soledad de estas personas puede ser aún mayor por el rechazo social, la discriminación y la falta de espacios seguros y de apoyo. Esto no quiere decir que todas las personas que pertenecen a estos colectivos se sientan solas, sino que tienen mayor riesgo de experimentar la soledad.

Te recomendamos leer nuestro post para aprender a cómo desarrollar hábitos de autocuidado emocional para evitar sentirte cuando perteneces a un colectivo social. 

Impacto de la tecnología en la sensación de soledad

Un artículo publicado por el AMA Journal of Ethics habla de la relación que existe entre la tecnología y el sentirse solo. Este artículo resalta que el uso del Internet reduce significativamente la comunicación de las personas con sus familiares, disminuye su círculo social y aumenta el riesgo de experimentar trastornos de salud mental como la depresión.

El uso de las redes sociales facilita la comunicación con otras personas, pero también impacta sobre la forma en la que nos relacionamos con los otros cara a cara. Comunicarse por aplicaciones de mensajería instantánea puede ser muy útil, pero también limita la profundidad de la relación que se tiene con los otros. 

Sentirse solo y su relación con la salud mental

Sentirse solo no solo es desagradable, sino que puede ser la causa de diferentes problemas de salud mental. Un artículo publicado por la National Library of Medicine destaca que las relaciones sociales son fundamentales para nuestra salud mental y física, por lo que la soledad puede derivar en problemas de depresión, desórdenes de personalidad, abuso de alcohol y trastornos del sueño.

Además, se debe tener en cuenta que la soledad afecta la forma en la que se piensa y se percibe la realidad, lo que también le dificulta a las personas la regulación de sus emociones. 

Consecuencias de sentirse solo

Como hemos mencionado en el punto anterior, sentirse solo tiene una serie de consecuencias negativas para la salud física y mental de las personas. Se trata de un problema que genera estrés, ansiedad y depresión, y que altera de manera profunda el bienestar de quienes lo experimentan.

La lista de consecuencias es muy amplia, tanto como para un artículo que hable solo de ello, por lo cual solo nos concentraremos en tres de sus principales efectos negativos.

Rumiación negativa

Cuando alguien empieza a sentirse solo, se pueden desencadenar una serie de pensamientos negativos sobre sí mismo y sus circunstancias. Sumergirse en este tipo de pensamientos afecta significativamente el bienestar emocional de las personas, y puede contribuir al desarrollo de problemas como la depresión.

Esto, además, afecta su capacidad para llevar a cabo sus actividades cotidianas, y puede afectar la relación que se tiene con los demás.

Disminución de la autoestima

La soledad también puede trastornar la visión que tiene una persona sobre su valor propio, y disminuye su autoestima. Generalmente, cuando las personas se sienten solas se cuestionan el por qué les cuesta tanto conectar con los demás, y muchas veces pueden interpretar la falta de interacción social como un reflejo de sus defectos personales.

Tal como lo señalamos antes, esto es algo que puede hacer que las personas eviten por completo cualquier tipo de interacción social, y hace que la situación en la que se encuentran empeore con el paso del tiempo.

Problemas de sueño

Sentirse solo también puede tener un impacto importante sobre los ciclos del sueño, ya que el estrés emocional y la rumiación negativa hacen que resulte muy difícil conciliar el sueño y descansar.

Esto, a su vez, puede derivar en otros problemas adicionales, ya que la privación del sueño también tiene consecuencias físicas y mentales. Por lo general, cuando no se duerme bien, a las personas les cuesta más concentrarse, y tienen problemas para gestionar sus emociones.

Tenemos un artículo muy interesante sobre la higiene del sueño que puede ayudarte a conciliar un mejor descanso si tienes problemas para dormir.

Aumento en el riesgo de suicidio

Un artículo titulado Association Between Loneliness and Suicidal Behaviour: A Scoping Review, señala que hay un vínculo bastante claro entre el estar y sentirse solo con el suicidio. Aunque se trata de algo que también está mediado por factores sociales, culturales e individuales.

Esta correlación tiene sentido porque la soledad puede llevar a las personas a experimentar diferentes problemas de salud mental, aunque no necesariamente en todos los casos es así.

Según el artículo, se trata de algo que tiene mayor prevalencia en las personas mayores. Esto puede deberse a una serie de factores, como la pérdida de seres queridos, la disminución de la movilidad y los cambios en las redes sociales y de apoyo.

Además, cuando las personas se aíslan, no cuentan con una red de apoyo social y emocional que les ayude a lidiar con el problema. 
 

Estrategias para prevenir y combatir la soledad

Empezar a sentirse solo puede ser una señal de que algo no está bien, pero se pueden tomar algunas medidas para prevenir la soledad y evitar sus consecuencias negativas. La American Psychological Association, señala que se trata de una tarea compleja, ya que las razones por las que alguien se siente solo varían mucho, pero también ofrece algunas recomendaciones.

Lo ideal es asistir a sesiones de terapia cognitivo conductual, no para mejorar las habilidades sociales y encontrar estrategias que sean útiles para conectar con las demás personas, sino para trabajar sobre los pensamientos negativos que puede producir el sentirse solo.

Desde esta perspectiva, las personas aprenden a reconocer y lidiar con los pensamientos negativos que pueden tener sobre su valor propio y sobre la forma en la que las perciben los demás, y tienen herramientas que les permiten afrontar la situación de una forma más efectiva.

Cuando se trata de adultos mayores, también es recomendable incluirlos dentro de actividades comunitarias o sociales. Los grupos de lectura, por ejemplo, no solo ayudan a disminuir significativamente la sensación de soledad. Además, según diferentes estudios, también mejoran la calidad de vida y reducen el riesgo de muerte.