Aprende cómo bajar la fiebre en adultos con estos métodos

Utiliza algunos medicamentos de venta libre

La lista de tratamientos para la fiebre es muy amplia, pero lo que los médicos y especialistas en salud suelen recomendar, en primer lugar, es tomar algunos medicamentos de venta libre. Según Mayo Clinic, muchos profesionales recomiendan tomar pastillas de acetaminofén o ibuprofeno.

Dependiendo del país en el que te encuentres, puedes encontrar estos medicamentos por su nombre comercial, como Tylenol (acetaminofen) y Advil o Motrin (ibuprofeno), este último también recomendado como medicamento para el virus de la gripe. Estos medicamentos también se conocen como antipiréticos, precisamente porque ayudan a regular la temperatura del cuerpo y a disminuir la fiebre.

A la hora de comprarlos tienes que prestar mucha atención a la información que tienen en la etiqueta, ya que la concentración puede variar. De igual forma, debes seguir las recomendaciones de uso para tomar la dosis adecuada.

Aplica compresas húmedas en la frente

Además de los medicamentos, existen algunos métodos o remedios caseros para bajar la fiebre. Es muy probable que ya los conozcas, pues son bastante populares y se vienen utilizando desde hace mucho tiempo en la mayoría de los hogares.

El más común de ellos es el de aplicar compresas húmedas en la frente o en la parte posterior del cuello. Se trata de algo muy simple, que puedes hacer siguiendo estos pasos:

• Empapar con abundante agua tibia una toalla o compresa.
• Escurrirla para eliminar el excedente de agua.
• Colocarla suavemente sobre la frente.

No está de más decir que para esto lo mejor es estar acostado, ya que de esta manera la compresa se mantiene en su lugar y solo se remueve cuando va a ser reemplazada por otra. 

Tomar baños de agua tibia

Verywell Health señala que darse baños de agua tibia no solo alivia los síntomas de la fiebre y la temperatura corporal, sino que también puede hacer que las personas se relajen y puedan dormir mejor. Esto es algo que puede ser muy útil, sobre todo si tenemos en cuenta que en muchas ocasiones la fiebre puede afectar los ciclos del sueño y la calidad del descanso.

Lo ideal es hacerlo en una bañera, pero si no tienes, puede ser con una ducha. Además, el baño debería prolongarse hasta que el agua empiece a enfriarse, esa es la señal de que ya se debe salir. 

Mantente hidratado

La sensación corporal que genera la fiebre no es el único problema al que te enfrentas, porque esta respuesta del cuerpo, que generalmente se produce para combatir infecciones, también puede ser causa de deshidratación. Cuanto más alta sea la temperatura corporal, por la fiebre, más alto es el riesgo de deshidratarse.

En este sentido, es recomendable consumir suficientes líquidos, de manera que se pueda recuperar el equilibrio de líquidos en el cuerpo y evitar el riesgo de deshidratación. Puedes consumir las bebidas que prefieras, pero lo más recomendable es mantenerse hidratado con agua, como ya te recomendamos en nuestro artículo sobre los beneficios de beber agua. En caso de que lo desees, también puedes tomar algunas bebidas deportivas. 

Descansar

La Cleveland Clinic también explica cómo bajar la fiebre, y señala que para hacerlo es necesario descansar, ya que así el sistema inmunológico puede ser más efectivo al lidiar con las infecciones o cualquier otro problema que esté aumentando la temperatura corporal.

Las personas que no se toman en serio el tema del descanso, pueden experimentar la fiebre durante más tiempo. Por eso, es importante quedarse en casa, y evitar cualquier tipo de tarea que represente un esfuerzo para el cuerpo.

Asimismo, es recomendable tratar de dormir. Es probable que por las molestias que genera la fiebre sea más difícil, sobre todo de día, pero hay que intentarlo ya que solo así se puede descansar como corresponde. Al respecto de esto, puedes leer nuestro artículo sobre la higiene del sueño y así mejorar tu calidad de descanso. 

Utiliza ropa ligera

Aunque utilizar ropa ligera no necesariamente baja la fiebre de forma directa, sí que puede ser de mucha ayuda. Verywell Health también habla sobre esto y señala que es importante estar en un entorno fresco y cómodo, y utilizar ropa que esté fabricada con tejidos ligeros y que facilite la transpiración.

Es normal que, al tener escalofríos, producto de la fiebre, las personas busquen la manera de abrigarse, pero hay que tener en cuenta que sobrecalentar el cuerpo puede ser contraproducente. Si notas que estás empezando a sudar más de lo normal, debes buscar la manera de refrescarte.

Esto último que mencionamos lo puedes hacer en conjunto con algunos de los métodos para bajar la fiebre que ya hemos comentado, como el aplicar compresas húmedas sobre la frente o beber ciertas bebidas refrescantes. 

¿Qué hacer para bajar la fiebre en los niños?

Saber cómo bajar la fiebre en los adultos no necesariamente sirve para ayudar a los niños, ya que se necesitan medicamentos apropiados para su edad y algunos métodos puede que no sean tan eficaces en ellos. En nuestro artículo sobre la fiebre en niños y en bebés tratamos más a fondo este tema, pero aquí te daremos algunas indicaciones clave.

Parents.com resalta que no es necesario recurrir a los medicamentos inmediatamente después de que los niños muestren señales de tener fiebre, ya que en algunas ocasiones la fiebre ayuda a desarrollar el sistema inmunológico y no necesariamente es un síntoma peligroso.

En caso de que la temperatura sea muy alta, o el niño se sienta mal, lo mejor es acudir a un médico, ya que él puede determinar si hace falta tomar algunos medicamentos para aliviar el malestar.

Con la ayuda de un especialista en salud se puede saber qué medicamento comprar y cuáles son las dosis recomendadas según la edad y el peso del niño. 

¿Qué debes evitar hacer si tienes fiebre?

Ahora ya sabes cómo bajar la fiebre con algunos de los métodos más efectivos, pero además de ello, también tienes que saber qué es lo que debes evitar hacer. Las personas suelen utilizar una infinidad de remedios caseros para aliviar los síntomas de prácticamente cualquier enfermedad, pero muchos de ellos no son efectivos y pueden generar efectos negativos sobre el cuerpo.

Para ayudarte a prevenir problemas adicionales, te comentamos de manera muy resumida qué es lo que debes evitar si tienes fiebre. De esta manera te mantendrás seguro y te podrás recuperar sin ningún contratiempo.

Evita frotar tu cuerpo con alcohol

Uno de los mitos más extendidos en lo que respecta al tratamiento de la fiebre es el de la efectividad de hacer masajes o aplicar compresas con alcohol sobre el cuerpo para bajar la temperatura. Se trata de un “remedio casero” que no solo no es nada efectivo, sino que puede generar problemas adicionales.

Generalmente, cuando las personas lo utilizan, sienten que el cuerpo se está refrescando, pero lo que pasa en realidad es que el alcohol se evapora muy rápido y enfría la piel. Esto puede indicarle al cerebro que se tiene frío, lo que hace que la temperatura aumente aún más.

Otro problema que puede generar esto es una intoxicación, porque el alcohol se absorbe muy rápido a través de la piel.

El uso del alcohol isopropílico de esta manera resulta problemático y puede generar escalofríos, intoxicación y un aumento significativo de la temperatura corporal, así que es mejor no utilizarlo para tratar o aliviar la fiebre.

No te excedas con las dosis de los medicamentos

Al principio del artículo señalamos que un médico te puede recomendar el consumo de ciertos medicamentos para tratar la fiebre y aliviar sus molestias, pero esto no quiere decir que no se deban tomar ciertas precauciones. Consulta siempre la cantidad que te corresponde. Excederse con la dosis no ayuda a que las personas se recuperen más rápido, y puede tener consecuencias negativas para la salud.

En este sentido, hay que tener en cuenta la cantidad de miligramos del compuesto activo que tiene cada pastilla y la frecuencia con la que se consume. Algunos de los efectos secundarios de los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos, como el ibuprofeno, son:

• Malestar estomacal.
• Sangrado gástrico.
• Daños en el hígado.

En otro artículo comentamos más detalladamente para qué sirve el ibuprofeno y cuándo es recomendable usarlo, siempre bajo prescripción médica.

No te des baños fríos

Cuando explicamos cómo bajar la fiebre señalamos que es recomendable darse baños con agua tibia. Es decir, el agua no debe estar ni caliente ni fría. Pero, ¿por qué no puede estar fría el agua? ¿No es un buen método para refrescar el cuerpo?

Aunque parezca que es buena idea bañarse con agua fría, Better Health señala que hacerlo puede ser contraproducente. El agua fría contrae los vasos sanguíneos, haciendo que sea más difícil para el cuerpo eliminar el exceso de calor del cuerpo; y por el choque térmico que genera, también puede generar escalofríos y aumentar aún más la temperatura corporal. 

¿Cuándo ir al doctor en caso de tener síntomas de fiebre?

La mayoría de las veces la fiebre no es un motivo de preocupación sino un síntoma molesto de algunas afecciones como el resfriado común. Sin embargo, en otros casos es necesario acudir a un médico para evaluar cuál es el problema subyacente.

Esto es algo que varía mucho en función de la edad, pero según Healthline, esto es lo que se debe tener en cuenta:

• Bebés de hasta 3 meses: se deben llevar a un especialista cuando la fiebre es igual o mayor a 38 grados, incluso si no hay otros síntomas. Es necesario identificar a la mayor brevedad el origen de la fiebre.  
• Bebés de 3 a 12 meses: si la temperatura corporal es mayor a 38.9° o se presentan otros síntomas, se debe acudir al médico para determinar qué la está produciendo.  
• Niños de 12 meses a 2 años: pueden consumir medicamentos pediátricos de venta libre bajo prescripción médica, y se debe acudir a un especialista en salud si la fiebre no baja o dura más de un día.
• Niños pequeños y adolescentes: si no hay respuesta al tratamiento y la fiebre supera los 38.9°. En cualquier caso, consulta con un especialista siempre que tengas dudas.  
• Adultos: cuando la fiebre es de más de 39.4° y el cuerpo no responde positivamente a ningún tratamiento.

Ten presente que automedicarse no es una buena práctica, porque sólo un médico, después de haber hecho una evaluación integral, puede recomendar qué medicamentos utilizar. Algunas personas pueden tener alergias a algunos componentes, lo que puede empeorar aún más la situación.